Hotel Artemis's reviews
Media reviews
Empire
Tiene problemas: cuando son escrutinados apropiadamente, no todos los puntos del conflicto se sotienen (...) y algunos personajes no tienen el reconocimiento que merecen. Pero sigue siendo una película trepidante y original, que rezuma estilo y que merecía mucho más que su deprimente paso por la taquilla estadounidense.
Roger Ebert
En su opera prima, el guionista Drew Pearce está rindiendo un claro homenaje a ese estilo cinematográfico [el de las películas de explotación de los setenta como 'Terminal Island' o 'La carrera de la muerte del año 2000'] y lo consigue con entretenidos aunque en ocasiones extraños resultados. El guión hace un buen trabajo al establecer con rapidez y eficacia la premisa y los personajes, especialmente en lo referente a las conexiones inesperadas que hay entre ellos, y demuestra un buen sentido del ingenio que le ayuda a evitar que sea otra película gore de festival cualquiera. Aun así, hay ciertos aspectos que no funcionan demasiado.
Entertainment Weekly
Lo único que se echa de menos (...) es un argumento más sólido. Aparte de una serie de flashbacks moteados con el hijo muerto de la Enfermera, la mayor parte de la historia se reduce a quién morirá primero y cómo. Lo mejor son las ejecuciones (literales), sobre todo las escenas de lucha y acrobacia de Boutella. El resto es una película de medianoche de intestinos y ruido, olvidable pero divertida.
New York Times
El señor [Drew] Pearce también está bien versado en preparar y rodar escenas de acción decentes y construir el suspense suficiente para que 'Hotel Artemis' sea divertida dentro de su saturada ambición. Si a ello le añadimos el bienvenido regreso de [Jodie] Foster a la gran pantalla después de un parón de cinco años, el resultado es una película que casi merece la pena ver.
Vanity Fair
¡Hay mucho para gustar aquí! Que es la razón por la que es una pena que la película se trabe (...). Dejando a un lado los mecanismos de guión sin desarrollar, sigo apoyando esta pequeña película idiosincrásica.
The A.V. Club
El Artemis tiene un entramado como el de un laberinto para ratones con puertas ocultas, y la película nunca da la impresión de saber dónde están sus personajes en todo momento. Aun así, no están tan definidos por sus andares como por lo que visten en los pies, usando planos detalle de zapatos como motivos.
The Hollywood Reporter
Dada la ambientación, es inevitable pensar en 'Blade Runner', pero con su fantasmagórico y laberíntico reino de pasillos tenuemente iluminados, se da una mayor reminiscencia de las localizaciones claves de la ciudad de Los Ángeles de 'Drive' (película cuya banda sonora también fue compuesta por Cliff Martinez). En una melancolía decorada, los personajes obtienen vistazos del infierno y de esperanza. Aun así, muy a menudo, están oscurecidos por las paredes y los murales así como la decadencia y las luces parpadeantes.
The Guardian
[Drew] Pearce elige la ación e inmediatez por encima del suspense, ignorando así los escenarios y situaciones que la película construye al estilo Hitchcock, quedando así desaprovechadas. La inteligencia de algunas situaciones y la intriga dejan paso a huecos en la lógica de la película y escenas de lucha genéricas que desembocan en un final descarado que deja caer la idea de una secuela. A pesar de sus fallos, aún tiene cosas que elogiar, siendo el resultado de tirar tantas cosas a una pared que alguna de ellas se queda pegada.
Vulture
En última instancia, en todo su invento artificial y aleatorio pero entusiasta, 'Hotel Artemis' me hace sentir un poco nostálgico por las películas francesas de género de los 90 de Jean-Pierre Jeunet y Marc Caro y, por supuesto, Luc Besson, aceptando sus bobeces y ensoñaciones con una falta de vanidad algo ilógica, casi ingenua.
The Washington Post
Demasiadas subtramas que hacen que la historia sea desordenada y no más inteligente.
The Wrap
Aunque la película presume de un escenario algo absurdo y una extraña mezcla de estilos físicos y de actuación (desde [Jodie] Foster y Sterling K. Brown hasta Jenny Slate y Dave Bautista), en sí misma es una representación de diálogos característicos del cyber-pulp y excesos de películas pop, que hace rodar los ojos y debilita los pocos momentos de placer a casi cada giro que ofrece.
Indiewire
Es una premisa colorida y un mejunje divertido de influencias de las que [Drew] Pearce hace un Frankenstein en una película que aúna cosas demasiado diferentes como para asumir una forma coherente por sí misma. Forjada entre el coraje del cine negro y la extravagancia de los dibujos animados [...], esta ópera del inframundo carece de la visión estilística necesaria para unir sus distintos modos. El argumento es obvio, los personajes arquetípicos y el diálogo está en desesperación por encontrar su propia voz.